Cada vez me divierto más haciendo pequeños animalitos de fieltro. En esta ocasión son unos sencillos caracoles de colores que hacen las delicias de mi nieto jugando con ellos.
Está cosido a punto de festón y los colores del caparazón son lo que le dan este aire alegre y divertido.
Aquí lo veis con otra combinación de colores. Los mofletes pintados de rosa le dan expresión y volumen, ¿no os parece?
Yo pienso que estos caracoles pueden tener diferentes utilidades: con un palito pueden convertirse en toppers para cupcakes, o adornos para las macetas, o para decorar un marco de fotos, y si le añadimos una cinta en la parte superior puede colgar de las mochilas de los niños, o como llaveros, o como regalito para un bautizo con el nombre del recien nacido en la parte posterior... o hasta donde alcance nuestra imaginación.
Son muy simpáticos, normal que a tu peque le gusten. Besos
ResponderEliminarQue chulos!!!
ResponderEliminary muy propios de nuestra comarca, EL SEGRIA.
un abrazo
QUE BONITINHOS AMEI.BEIJO.VALÉRIA.
ResponderEliminarSon una monada!!!
ResponderEliminarBesitos guapa
Esperanza, que cucada de caracoles, me encantan.
ResponderEliminarBesitos.
Olga
Esperanza los caracoles te quedaron chulísimos!!! La verdad es que tienen muchas utilidades. Un besote guapa
ResponderEliminarMe encantan, son monisimos.
ResponderEliminarUn besote
UNos caracoles monísimos, me ancantan. Y es cierto que estos colores les dan un aire muy divertido.
ResponderEliminarBesos !!!!
Son super graciosos!!
ResponderEliminarBesos.
Hola Esperanza!
ResponderEliminarHe descubierto tu blog gracias a SanPinterest y quedé ANONADADA!
Que cosas mas maravillosas haces! Una pasada!
Me hago seguidora para no perderme nada
Un beso, nos "vemos" pronto
Rosana
Son unos caracoles simpatiquísimos.
ResponderEliminarBss.